Es la pregunta que hoy se hacen muchos de los licenciatarios de cananbis en Colombia, luego de la ejecución de un Proyecto de Interés Nacional y Estratégico que favoreció a empresas con grandes capitales
Hierbabuena Revista – Sistema Informativo –
20 de enero de 2023.- La Resolución 227 de 2022, de los ministerios de Justicia y del Derecho, Agricultura y Desarrollo Rural, y Salud y Protección Social, definieron que los Pequeños y Medianos Cultivadores, Productores y Comercializadores de Cannabis deberían tener un tratamiento especial, con el ánimo de apoyar el agro colombiano y consideraron que las empresas licenciatarias de Fabricación de Derivados deben adquirir por lo menos el diez por ciento (10%) de cannabis psicoactivo, o su equivalente a cannabis no psicoactivo, del cupo asignado de un esquema asociativo o de un pequeño productor. Además, considera la norma, que estas empresas de fabricación de derivados deben dar asistencia técnica y/o transferencia de tecnología a estos pequeños cultivadores.
Consultando a algunos de los 674 fabricantes de derivados licenciados por el Ministerio de Salud y Protección Social, sostienen que, aunque tienen conocimiento que existen 61 esquemas asociativos y personas naturales de pequeños y medianos cultivadores, según listado del Minjusticia actualizado el 9 de agosto de 2022, la heterogeneidad en la calidad, la falta de certificaciones internacionales de buenas prácticas agrícolas, cosecha y poscosecha y la inseguridad en volúmenes de entrega, hacen difícil cerrar negocios y alianzas con estos pequeños y medianos cultivadores.
Si bien es cierto que aún falta desarrollar técnicas y metodologías que garanticen ofrecer productos estandarizados en volúmenes importantes, hay empresas que ya estamos listas para alinearnos con los grandes jugadores de la cadena productiva, toda vez que llevamos más de cinco años preparándonos para este momento.
Igualmente, es de la mano de los fabricantes de derivados y de los productores y comercializadores de productos farmacéuticos, cosméticos, alimenticios y suplementos dietarios, entre otros, que se logrará en el corto plazo producir flores, biomasa y granos de alta calidad en los volúmenes requeridos. Este círculo virtuoso hay de iniciarlo cuanto antes (alianzas fabricantes y cultivadores), de lo contrario la norma será letra muerta y el agro colombiano, en la escala que el nuevo gobierno nacional lo exige, será complejo y demorado lograrlo.
Nosotros y algunos colegas comprometidos con el sector estamos listos y pedimos pista para que los gobiernos municipales, departamentales, y, por supuesto, el Gobierno Nacional y las empresas nacionales y extranjeras, nos miren como verdaderos aliados para entregar productos de la calidad requerida a bajos precios, toda vez que las condiciones agroecológicas de algunos sectores de la geografía colombiana ofrecen condiciones óptimas para el desarrollo de esta industria.
Carlos Arturo Martínez Urrea, gerente de producción de Asomiravalle Norte, empresa asociativa de 43 pequeños y medianos cultivadores ubicada en Yumbo, Valle del Cauca.